DIBUJO / Joaquín Sorolla
Recuerdo perfectamente la primera vez que vi una pintura de Joaquín Sorolla (Valencia, 27 de febrero de 1863-Cercedilla, 10 de agosto de 1923). Fue en el Museo de Bellas Artes de Asturias, en Oviedo, y me quedé flipando con cómo jugaba con la luz y el color. El cuadro al que me refiero (me avergüenza reconocer que no recuerdo el título) no está expuesto allí actualmente, pero sí hay 13 obras dignas de contemplar.
Niños correteando por las
playas, apuesta ganadora en los pinceles de Sorolla que consigue transportarte
dentro de estas estampas bucólicas que nos evoca los mejores recuerdos de la
infancia.
Emigró a París dónde sus
obras no tardaron en cautivar a los más entendidos. Su amistad con el
coleccionista estadounidense Archer M. Huntington le abrió las puertas al otro
lado del charco. Han pasado ya 100 años desde su muerte, pero sus obras
permanecen igual de frescas que el primer día.
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