RESEÑAS MUSICALES / Depedro
DEPEDRO
Nubes De Papel (2010)
Fecha de lanzamiento: 22/09/2009
Discográfica: Dejame Decirte
Productor: Richard Chyqui
Valoración: 8/10
En pleno estado de gracia. Así se encuentra Javier Zabala, liderando a su nuevo pasatiempo, Depedro, en un segundo trabajo cargado de historias cercanas con las que todos podremos identificarnos.
Le pudo tocar a cualquier otro apasionado de la música, pero la fortuna sonrió, merecidamente, a Jairo Zabala. Lejos queda el poner música para El Club De La Comedia, o tocar como uno más en Vacazul y Amparanoia. Ahora Jairo lidera indiscutiblemente un proyecto, Depedro, en donde deja fluir todo su talento sin ningún tipo de ataduras.
Tras un primer disco fabuloso (que encandiló a todo aquel que lo escuchó) llega la reválida en forma de "Nubes De Papel", un trabajo más íntimo si cabe. Ajeno y alejado de cualquier tipo de etiquetas, Depedro no necesita arrimarse a terrenos comerciales para convencer a un público amplio. Un estilo propio y universal, que pilla un poco de aquí (música latina, pop de cantautor) y un poco de allí (tex-mex, americana, rockfronterizo), y que tiene ese aroma callejero que lo hace cercano a todos los públicos.
La ternura desmedida con la que abre "Eternamente" es una muestra de lo que quiere para este segundo disco. Melodías frágiles, inofensivas, que se mezclan con preciosas letras diseñadas para ser cantadas (entonadas, bien con gritos, bien con susurros) pero siempre llenas de vida.
Un trabajo para dejarse envolver, para sentir como tuyos los momentazos de "Tu Mediodía" (primer sencillo), estribillos iluminados como los de "Nubes De Papel", los adictivos ritmos de "Chilla, Que Tiemble" o la tímida psicodelia de "Mientras Espero". Simplemente hermoso.
Tras un primer disco fabuloso (que encandiló a todo aquel que lo escuchó) llega la reválida en forma de "Nubes De Papel", un trabajo más íntimo si cabe. Ajeno y alejado de cualquier tipo de etiquetas, Depedro no necesita arrimarse a terrenos comerciales para convencer a un público amplio. Un estilo propio y universal, que pilla un poco de aquí (música latina, pop de cantautor) y un poco de allí (tex-mex, americana, rockfronterizo), y que tiene ese aroma callejero que lo hace cercano a todos los públicos.
La ternura desmedida con la que abre "Eternamente" es una muestra de lo que quiere para este segundo disco. Melodías frágiles, inofensivas, que se mezclan con preciosas letras diseñadas para ser cantadas (entonadas, bien con gritos, bien con susurros) pero siempre llenas de vida.
Un trabajo para dejarse envolver, para sentir como tuyos los momentazos de "Tu Mediodía" (primer sencillo), estribillos iluminados como los de "Nubes De Papel", los adictivos ritmos de "Chilla, Que Tiemble" o la tímida psicodelia de "Mientras Espero". Simplemente hermoso.
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