CRÓNICA FREEDONIA
FREEDONIA
Su repertorio está formado en su mayor parte por los cortes incluidos en su primer largo, de título homónimo, entre los que destacan, por encima del resto, ese pepinazo de Soul frenético llamado "Running To Nowhere" (el mejor ejemplo de que un concierto de Freedonia no es para ver sentado) o su gran éxito "Heaven Bells". Dos caras del Soul, cada una con su encanto, interpretadas maravillosamente, que sirven para invocar los espíritus de leyendas como Marvin Gaye, Al Green o Aretha Franklin.
Antes de los bises, y presentando a la banda, rindieron homenaje al gran Otis Redding con su agitado "Shake". Todos los músicos se llevaron grandes aplausos, pero la ovación del final a Maika recordaba a las que le dedicaban a Iniesta cada vez que salía de un campo de fútbol tras darnos la Copa del Mundo.
Y aún faltaba la descarga final, para la que eligieron los dos cortes incluidos en su nuevo EP: la versión del clásico de los Animals (versionada hasta la fecha de todas las maneras posibles) "Please, Don´t Let Me Be Misunderstood" y el maravilloso "Beggin You".
Atronador aplauso final, con la gente de pie, con la sonrisa dibujada en el rostro de todos: de los músicos, orgullosos de su obra; de los presentes, orgullosos de disfrutarla; y la sonrisa de Maika, inmensa y radiante por encima de todos, la de una artista que disfruta y hace disfrutar desde el escenario a todos, y lo más importante de todo, consiguiendo que todos nuestros problemas queden olvidados, al menos, mientras ella está presente.
Teatro Municipal (Ribadeo)
16 de noviembre 2013
Todo lo que digan de ellos de su directo no les hará justicia. Freedonia es una de las bandas en mejor forma de nuestro país y no hay sensación descriptible como verlos en directo.
Hay gente que nace con un don, aunque no siempre tenga la oportunidad de demostrarlo. Maika Sitte nació para ser artista, y por suerte, la banda Freedonia se ha convertido en la vía para canalizar todo su talento. Y no fue fácil, ni para ella, ni para la banda. La anterior vocalista, Aurora García, rebosaba carisma y vozarrón, y ya se sabe lo recelosos que somos con los cambios de cantantes. A Maika, que se encontraba en un segundo plano como corista, se le brindó la oportunidad de liderar a la banda desde el escenario, una oportunidad que no iba a desaprovechar.
Hubo algún escéptico al principio, de esos que no tenían ganas de ser pacientes con Maika, pero lo cierto es que cualquier transición, por muy natural que sea, lleva su tiempo, y una vez que esta se ha adaptado a los músicos, Freedonia ha dado un salto de calidad innegable, aumentando si cabe su nómina de público.
Ribadeo sería una prueba más. Vestidos de etiqueta, como salidos del vestuario de la serie Mad Men, los 9 chicos de la banda salen a la palestra e interpretan una intro donde muestran su colorida paleta musical: un popurri bien hilvanado de Soul, funky y afrobeat que dará paso al huracán.
Maika sale al escenario con hambre, con ganas de devorar al público, con una personalidad arrolladora, con confianza. Si algún día hubo dudas acerca de ella, bastan unos segundos para notar que han quedado disipadas hace tiempo. Maika no es sólo un poderoso chorro de voz, es puesta en escena, es Soul. Se contonea al ritmo que le imponen los excelentes músicos que le acompañan y parece que todo gira alrededor de ella. Ellos lo saben, nosotros lo sabemos. Maika manda en el escenario con una autoridad incuestionable. Basta un golpe de cadera hacia su derecha para que la sección de vientos se active, una para su izquierda para que percusión y teclados tomen la iniciativa. Pocos son los intérpretes capaces de transmitir en estilos tan profundos como el Soul. Tienes que sentir esas historias, creértelas, y sólo aquellos capacitados para ello son los que consiguen erizarte el vello.
Su repertorio está formado en su mayor parte por los cortes incluidos en su primer largo, de título homónimo, entre los que destacan, por encima del resto, ese pepinazo de Soul frenético llamado "Running To Nowhere" (el mejor ejemplo de que un concierto de Freedonia no es para ver sentado) o su gran éxito "Heaven Bells". Dos caras del Soul, cada una con su encanto, interpretadas maravillosamente, que sirven para invocar los espíritus de leyendas como Marvin Gaye, Al Green o Aretha Franklin.
Antes de los bises, y presentando a la banda, rindieron homenaje al gran Otis Redding con su agitado "Shake". Todos los músicos se llevaron grandes aplausos, pero la ovación del final a Maika recordaba a las que le dedicaban a Iniesta cada vez que salía de un campo de fútbol tras darnos la Copa del Mundo.
Y aún faltaba la descarga final, para la que eligieron los dos cortes incluidos en su nuevo EP: la versión del clásico de los Animals (versionada hasta la fecha de todas las maneras posibles) "Please, Don´t Let Me Be Misunderstood" y el maravilloso "Beggin You".
Atronador aplauso final, con la gente de pie, con la sonrisa dibujada en el rostro de todos: de los músicos, orgullosos de su obra; de los presentes, orgullosos de disfrutarla; y la sonrisa de Maika, inmensa y radiante por encima de todos, la de una artista que disfruta y hace disfrutar desde el escenario a todos, y lo más importante de todo, consiguiendo que todos nuestros problemas queden olvidados, al menos, mientras ella está presente.
Comentarios
Publicar un comentario