LITERATURA / Yuval Noah Harari

Yuval Noah Harari
Sapiens. De animales a dioses



10 millones de copias despachadas a lo largo y ancho del planeta, Bill Gates dijo que "recomendaría este libro a cualquier persona. Es entretenido y desafiante, no se puede dejar de leer". Que te recomienden personalidades como el citado Gates, Barack Obama o Mark Zuckerberg es un escaparate infalible para que tus ventas se disparen. En "Sapiens", Yuval Noah Harari -uno de los historiadores más populares en la actualidad- hace un repaso a la historia de la humanidad. Una interpretación libre, muy bien documentada en forma de ensayo, en el que el lector no deja de aprender desde la primera página. 

...la evolución favoreció a los que eran capaces de crear lazos sociales fuertes. Además, y puesto que los humanos nacen subdesarrollados, pueden ser educados y socializados en una medida mucho mayor que cualquier otro animal. La mayoría de los mamíferos surgen del seno materno como los cachorros de alfarería vidriada salen del horno de cochura: cualquier intento de moldearlos de nuevo los romperá. Los humanos salen del seno materno como el vidrio fundido sale del horno. Pueden ser retorcidos, estirados y modelados con un sorprendente grado de libertad. Esta es la razón por la que en la actualidad podemos educar a nuestros hijos para que se conviertan en cristianos o budistas, capitalistas o socialistas, belicosos o pacifistas. 
.........

Desde luego, las diferencias en capacidades naturales también desempeñan su papel en la formación de distinciones sociales. Pero estas diversidades de aptitudes y carácter están mediadas normalmente por jerarquías imaginadas. (...) la mayoría de las capacidades han de cuidarse y desarrollarse. Incluso si alguien nace con un talento concreto, por lo general dicho talento permanecerá latente si no se promueve, se refina y se ejercita. No todas las personas tienen las mismas posibilidades de cultivar y refinar sus capacidades. Por regla general, que tengan o no dicha oportunidad dependerá del lugar que ocupen en la jerarquía imaginada por su sociedad. (...) aun en el caso de que personas pertenecientes a clases diferentes desarrollen exactamente las mismas capacidades, es improbable que disfruten del mismo éxito, porque tendrán que jugar la partida con reglas distintas. 

.........

El dinero se basa en dos principios universales:
a) Convertibilidad universal: con el dinero como alquimista, se puede convertir la tierra en lealtad, la justicia en salud y la violencia en conocimiento. 
b) Confianza universal: con el dinero como intermediario, cualesquiera dos personas pueden cooperar en cualquier proyecto. 
Estos principios han permitido a millones de extraños cooperar efectivamente en el comercio y la industria. Pero estos principios aparentemente benignos tienen un lado oscuro. Cuando todo es convertible, y cuando la confianza depende de monedas (...), esto corroe las tradiciones locales, las relaciones íntimas y los valores humanos, y los sustituye por las frías leyes de la oferta y la demanda. 

.........

...la política económica más sensata es mantener a la política lejos de la economía, reducir los impuestos y la normativa gubernamental a un mínimo y dejar a las fuerzas del mercado libertad para tomar su camino. Los inversores privados, libres de consideraciones políticas, invertirán su dinero allí donde puedan obtener el máximo beneficio, y así la manera de asegurar el máximo crecimiento económico (que beneficiará a todos, industriales y obreros) es que el gobierno intervenga lo menos posible. 

.........

Si la felicidad viene determinada por las expectativas, entonces dos pilares de nuestra sociedad (los medios de comunicación y la industria publicitaria) pueden estar vaciando, sin saberlo, los depósitos de satisfacción del planeta. Si el lector fuera un joven de dieciocho años en una pequeña aldea de hace 5.000 años, probablemente pensaría que era bien parecido porque solo había otros 50 hombres en su aldea y la mayoría de ellos eran ancianos, o tenían cicatrices o arrugas, o todavía eran niños pequeños. Pero si el lector es un adolescente en la actualidad, tiene muchas más probabilidades de sentirse incómodo. Incluso si los demás chicos de la escuela son feos, el adolescente no se compara con ellos, sino con las estrellas de cine, atletas y supermodelos que vemos continuamente en la televisión, en Facebook y en las carteleras gigantes. 

.........

...los hallazgos demuestran que la felicidad no es un exceso de momentos agradables en relación con los desagradables. Más bien, la felicidad consiste en ver que la vida de uno en su totalidad tiene sentido y vale la pena. Hay un importante componente cognitivo y ético de la felicidad. (...). Tal como lo planteaba Nietzsche, si uno tiene una razón por la que vivir, lo puede soportar casi todo. Una vida con sentido puede ser extremadamente satisfactoria incluso en medio de penalidades, mientras que una vida sin sentido es una experiencia desagradable y terrible, con independencia de lo confortable que sea. (...) De modo que quizás la felicidad consista en sincronizar las ilusiones personales del sentido con las ilusiones colectivas dominantes en cada situación. (...) Esta es una conclusión bastante deprimente. ¿Acaso la felicidad depende realmente de engañarse a sí mismo?

.........

Según el budismo, la raíz del sufrimiento no es ni la sensación de dolor ni la tristeza, ni siquiera la falta de sentido. Más bien, el origen real del sufrimiento es la búsqueda continua e inútil de sensaciones fugaces, que hace que estemos en un estado de tensión constante, de desazón y de insatisfacción. Debido a esta búsqueda, la mente nunca está satisfecha. Incluso cuando experimenta placer no está contenta, porque teme que esta sensación desaparezca pronto, y anhela que dicha sensación permanezca y se intensifique. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

LITERATURA / Manuel Vilas

VIAJES / Portugal

LITERATURA / Sara Mesa